Hoy quiero hablaros de la nostalgia, ese sentimiento tan común y difícil de expresar que nos provoca un recuerdo feliz.
Y es que es una emoción tan poderosa por su capacidad de conmovernos y hacernos sentir bien, que el marketing y la publicidad no han dudado nunca en sacarle provecho.
Seguro que muchos de vosotros habréis visto últimamente productos de épocas pasadas relanzados al mercado, nuevas versiones, anuncios con una estética claramente ochentera o noventera, etc.
Pero, ¿sabéis qué intención hay detrás de esto?
La nostalgia como mecanismo de ventas
Lo retro o vintage siempre ha estado de moda, pero me atrevería a decir que estos últimos años ha cogido mucha fuerza entre los millennials y centennials. ¿Por qué?, os preguntaréis.
Pues bien, en primer lugar tiene que ver con que somos dos generaciones marcadas y lastimadas por crisis económicas (sobre todo los millennials que están viviendo la segunda), por la inestabilidad, la precariedad laboral, los inalcanzables precios del alquiler y la gran etiqueta de “propagadores del Covid-19” que se nos ha puesto, entre otras cosas.

¿Aún os extraña que seamos las generaciones más nostálgicas?
Si no hacemos más que anhelar la vida laboral de nuestros padres, desear el pasado y el poder refugiarnos en la infancia: un lugar seguro donde no existían los problemas, ni las preocupaciones económicas…
Pero, ¿quiere decir esto que otras generaciones no sienten nostalgia?
No, los millennials y los centennials son solo un ejemplo. La realidad es que la nostalgia es un estado de ánimo tan general y universal que se ha convertido en un arma esencial para el marketing de las marcas. Todo con el objetivo de vender productos y destacar frente a la competencia.
¿Cómo funciona el marketing de nostalgia?
Esta estrategia de marketing consigue conectar con los consumidores mediante códigos y mensajes que ya conocen y ante los cuales acabaran reaccionando rápidamente.
Además, les permite revivir una experiencia pasada y evoca un pensamiento positivo para que así se consuma el producto o servicio.
¿Qué marcas han integrado el marketing de nostalgia en su estrategia?
Como comentaba antes, actualmente nos encontramos en un momento de revival de los 80 y 90, y estas son algunas de las marcas que han relanzado productos o se han inspirado en la estética de esas décadas:
Nestlé Jungly
Seguro que habréis oído hablar del retorno de la famosa tableta de chocolate que alegraba las meriendas de la infancia de los jóvenes millennials. Era todo un éxito hasta que Nestlé decidió retirar el producto del mercado.
A partir de ese momento no hicieron más que salir peticiones en redes sociales para que volviera Nestlé Jungly.
Uno de los partidarios de su vuelta fue el youtuber y streamer Ibai Llanos, quien posteriormente ganó la polémica subasta promovida por la marca en eBay del primer ejemplar del producto. ¡Por más de 6.000€!
Ahora el producto ya está disponible en muchos supermercados.
McDonald’s
La firma de comida rápida también ha querido usar el recurso de la nostalgia, y a través de la campaña ideada por la agencia TBWA, ha relanzado dos de sus productos clásicos por un tiempo limitado: la hamburguesa Grand McExtreme 1955 y el Apple Pie.
La acción de McDonald’s tiene como objetivo contribuir a que los más nostálgicos vuelvan a disfrutar de otras épocas. Por este motivo, en el spot han utilizado elementos clave que representan los años 80: un coche parecido al de DeLorean de “Regreso al Futuro”, la música esa década, la estética y la vestimenta.
Pizza Hut y Burger King
En cuanto a branding, muchas marcas están optando por volver a utilizar su logotipo original.
Es el caso de Pizza Hut, que va a usar tanto su logo actual como el que tuvo desde 1967 hasta 1999, época en la que lideraba el mercado.

Otras marcas, como Burger King, han preferido hacer un rebranding completo de su imagen. Han modificado el logo inspirándose en el que se usó desde 1969 hasta 1999, y también han cambiado el packaging, el merchandising, los uniformes y la decoración de los establecimientos.
En conclusión, el marketing de nostalgia es una estrategia que siempre funcionará y tendrá éxito si las marcas convierten los recuerdos en algo actual, adaptado a la nueva era digital y a las costumbres del momento.
Esto implica centrarse en la cultura moderna, estar al día de las tendencias actuales, y escuchar activamente al público objetivo.
Paco Martínez
13/03/2021 at 23:51La nostalgia sin obsesión es positiva. Ayuda a superar momentos de decaimiento y a veces es motivo de superación. Me encanta ese anuncio de McDonald’s.
Eva
15/03/2021 at 07:08Bravo!!
5 minutos y volvemos
06/04/2021 at 09:28¡Muchas gracias Eva! 🙂